La Comisión de Ciudadanos por los Derechos Humanos se asegura de victorias importantes para la protección de los maltratados por la psiquiatría.
La Comisión de Ciudadanos por los Derechos Humanos se está expandiendo, con 174 filiales ahora activas en todo el mundo. Su trabajo continúa extendiéndose en múltiples frentes. La vigilancia de la organización sobre la industria farmacéutica resultó en 32 nuevas advertencias siendo obligatorias para las drogas psiquiátricas en el 2017. Desde su inicio en 1969, CCHR ha jugado un papel fundamental en la aprobación de 220 proyectos de ley contra la psiquiatría y la anulación de 375 proyectos de ley en pro de la psiquiatría. En el ámbito de las acciones disciplinarias del gobierno, los psiquiatras enfrentan 33 000 millones de dólares en multas, daños y perjuicios legales y un presupuesto recortado ligado al trabajo de CCHR. Este fue directamente responsable de la revocación de la licencia de 140 psiquiatras individuales, 124 solo en Japón, y el encarcelamiento de siete más. En el frente de la concienciación pública, los miembros de CCHR han distribuido 21 millones de folletos informativos. Las 20 Exhibiciones Itinerantes de CCHR atrajeron a 135 800 visitantes en el 2017 mientras atravesaban 31 000 kilómetros. El total acumulado es ahora más de 640 000 kilómetros de distancia, o 16 viajes alrededor del mundo.
En el 2017, la Comisión de Ciudadanos por los Derechos Humanos aumentó la apuesta en su continuo esfuerzo por hacer que la industria psiquiátrica sea responsable de sus devastadoras fechorías. Encontrando que todo el sistema de salud mental es culpable de fraude y malversación, CCHR volvió a consagrarse en la lucha contra la terapia de electrochoque y la práctica de la prescripción de drogas psiquiátricas a los niños.
Desde su fundación en 1969, el comité de vigilancia de la salud mental ha estado trabajando para proteger los derechos de los pacientes y sus familias. CCHR también ha estado evitando que los proveedores de servicios defrauden a Medicaid y Medicare en Estados Unidos, donde solo en el 2014 (el último año para el que las estadísticas están disponibles), hubo fraude de por lo menos 148 millones de dólares.
Citando la subjetiva y fraudulenta naturaleza de los diagnósticos psiquiátricos (ya que no hay ningún análisis objetivo de sangre o escáner de imágenes para la detección de la enfermedad mental) y la facilidad con que los diagnósticos psiquiátricos pueden cambiarse para obtener más dinero de las aseguradoras, CCHR ha instado a los profesionales de la salud que poseen conocimiento interno de fraude a beneficiarse de las leyes de protección de denunciantes para que hablen al respecto.
El caso más explosivo es uno en marcha, desde hace varios años, contra Universal Health Services (UHS), un hospital de salud mental con un peligroso historial de fraudulentas prácticas médicas y empresariales. Desde abril de 2016 hasta abril del 2017, fueron presentadas casi 4500 quejas en contra de UHS, la mayoría incitadas por CCHR. Para juzgar la escala del engaño perpetrado contra el público, solo hay que considerar que una instalación de UHS en Texas, gracias a la diligencia de CCHR, acordó pagar al gobierno de EE. UU. 860 000 dólares para resolver acusaciones de la Ley de Reclamaciones Falsas contra ellos.
CCHR también sigue de cerca el desarrollo de las iniciativas legislativas para limitar los abusos psiquiátricos, distribuye materiales educativos en todo el mundo, y en el 2017, causó directamente el arresto o la cancelación de certificados de 140 psiquiatras.